miércoles, 8 de mayo de 2013

I CARRERA 5K AVILA



Y ahí estaba yo en la salida…
Una lesión de Mercedes, tan imprevista como inoportuna nos dejó en casa tan preocupados como fastidiados y … con un dorsal encima de la mesa.
Y ¿por qué no corres tú? Pues, es verdad,… ¿por qué no correr?
Todo lo que estaba haciendo hasta entonces era correr un día sí y otro no media hora de trote suave, pero eso bastaría para probar a ver qué tal estaban los pies. En el peor de los casos sería una carrera de unos veinticinco minutos y, si notase algo raro, siempre podía parar, así que … correría los 5K de Ávila.
Y los corrí.
Y pasaron dos cosas que, de no haber corrido, no sabría ahora.

Una, que los pies no me dolieron. No noté molestia alguna a lo largo de la carrera. Cosa muy importante de cara a ganar confianza y progresar. Me queda mucho camino por recorrer todavía, pero, de momento, la cosa marcha.

Dos, que mucha, mucha gente, muchos corredores y muchos amigos se alegraron sinceramente de volver a verme vestido “de romano”. Si lo primero es importante, os aseguro que esto lo es mucho más.  

3 comentarios:

  1. Que alegrón verte de nuevo "vestido de romano", aunque luego al final no te vi, ya me han dicho que no te dolió el pie y eso me alegró mucho más. Aunque siempre se agradecían tus fotos, ya tenemos muchas y es mucho mejor verte corriendo que de fotografo

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias ... una vez más. Siempre me habéis apoyado mucho y ahora que "la cosa" marcha espero que podamos compartir muchas carreras.

    ResponderEliminar
  3. Me alegro mucho de tu vuelta al ruedo. Que dure mucho. ¡¡Ánimo!!

    ResponderEliminar