jueves, 25 de septiembre de 2014

III CARRERA ÁVILA SOLIDARIA 2014



5.184 euros es la marca que conseguimos entre todos el pasado sábado en la Carrera Ávila Solidaria. Dicho en término atléticos es Mejor Marca Personal, porque se recaudaron  casi dos mil euros más que el año anterior.
Además hubo record de participación con más de 900 personas inscritas.
Y por último, coincidiendo con que hacía buena tarde, había certamen de magia y varios bodorrios, estaba la ciudad de lo más animada.
Total … un éxito.

El atletismo en Ávila se mueve. Hay cada vez más corredores, pero también hay más iniciativas de todo tipo: nuevos clubes, más organizadores, tiendas de running, grupos de entrenamiento…. Una alegría para los que nos gusta esto.

En cuanto a la carrera, todas las personas con las que hablé reconocieron el buen trabajo de la organización y compartieron la satisfacción de ver cómo se va consolidando en el calendario de carreras de la provincia.

Por lo que respecta a la prueba en sí… a mí se me hizo dura. Las cuestas, el pavés, el ritmo … Salí fuerte, más por el deseo de ir con el grupo que llevaba delante (Ángel, Alfonso, Encabo, Vicente…) que por fuerza en las piernas, que no tenía mucha. El apretón me duró algo más de tres kilómetros, más o menos lo que tardé en llegar a San Vicente. Allí se me agotó el combustible. Reventé.
En el kilómetro 5 (18’45’’) me quedé bastante solo al finalizar la prueba sobre esa distancia, así que comencé la segunda vuelta con la intención de alcanzar definitivamente al grupo que me precedía. Hice un esfuerzo serio hasta la plaza de Italia, donde me di cuenta que no era mi día. Así que desde allí a la meta procuré mantener un ritmo cómodo pero intenso que me permitió llegar en 38’26’’ en el puesto 23º de la general y 2º veterano de mi categoría. 19’41’’ en el segundo 5.000, es decir, casi un minuto más en la segunda mitad de la carrera que en la primera.
Otro 10.000 más en la temporada. He vuelto a perder la cuenta pero deben ir cerca de 10 ya y casi todos entre 37’50’’ y 38’30’’.

Y ahora a mirar a la Media de Ávila, que queda poco para el día 5 de octubre.

lunes, 22 de septiembre de 2014

ASPACE Y VICTOR: OTRO RETO SOLIDARIO




Las terrazas de San Segundo abarrotadas de gente. El Grande y el Paseo del Rastro como las mejores tardes de toros en Las Ventas. La Ronda de la Muralla fotografiada una y mil veces.

Y desde las 9 de la mañana ese recorrido sirviendo de marco para la primera etapa del reto solidario de Víctor. Correr, correr y correr. Correr por los demás.

Hay muchas formas de ayudar a los que necesitan ayuda. Si cada uno de nosotros tuviéramos la valentía y el coraje de mirarnos dentro y preguntarnos qué podemos hacer por los que nos rodean, las cosas serían diferentes, no solo en esta cuidad. Serían diferentes en este país.

Pero las cosas son como son porque no todos somos lo suficientemente valientes para, después de esa mirada interior, darnos una respuesta y ponerla en marcha.

Víctor no es la persona que más corre de Ávila. Ni la que más kilómetros es capaz de hacer. Tampoco es la que tiene más medios, más dinero, …. Pero es una de las personas que más valor tiene para poner en marcha su idea de cómo ayudar. Igual que hace unas semanas lo hicieron Josemi y Pablo con su reto a favor de la Asociación Española Contra el Cáncer y en la difusión de la donación de Médula Espinal. Igual que el sábado la Asociación Juvenil Barrio de Las Hervencias organizando su carrera a beneficio de la Asociación de Esclerosis Múltiple de Ávila.

Ayer Ángel Rivas le acompaño en todo el trayecto y unos cuantos, a tramos. Después, al terminar fuimos a la sede de ASPACE. Estuvimos charlando un rato y conociendo lo que hacen.

De todo lo que hablamos varias cosa se me quedaron muy grabadas en la cabeza… sobre todo lo afortunados que somos algunos de no haber tenido la necesidad de utilizar los servicios de la asociación porque no hemos sufrido en nuestras familias la existencia de alguien afectado de parálisis cerebral. 
Pero también la modestia de sus necesidades materiales más básicas y que esperaban cubrir con lo que pudieran recaudar a través de la iniciativa de Víctor. Comparado con el despilfarro en el que hemos estado viviendo estos años atrás me provocó una reacción de rabia contra nuestra sociedad bastante iracunda.

¿Qué podemos hacer ahora los demás? Acompañar a Victor, no solo en sus maratones sino es su afán por recaudar el dinero para esos gastos extra de ASPACE. Podemos campar su camiseta y su mochila de venta en la Asociación:
 c/ Casimiro Hernanndez, 7 C.P. 05002,- Ávila
Tel: 920 256 394 - Móvil: 696 017 199


Ahora mismo Víctor anda por ahí corriendo su maratón del lunes. Es verdad que también hay que estar un poco loco. 
Bendita locura.

jueves, 18 de septiembre de 2014

ENTRENAR A PLAN. A PLAN … DE ENTRENAMIENTO




 Cada vez hay más gente corriendo. No descubro nada nuevo. No hay más que ver las calles, los parques, las playas, los montes… gente corriendo por todas partes y a todas horas. En todas las ciudades sin distinción. Nos ha invadido la fiebre de hacer deporte. Bendita calentura.
El problema radica en saber hacer las cosas con cabeza. Con un punto de sensatez de manera que se pueda disfrutar de la práctica del deporte sin caer en sus riesgos: las temidas lesiones.
¿Por qué nos lesionamos? La mayoría de las veces se trata de problemas de sobrecarga.
Y … ¿Por qué nos sobrecargamos? La mayoría de las veces, porque hacemos más de lo que debemos, porque lo que hacemos lo hacemos mal sin saberlo o porque no hacemos cosas que pueden evitar la sobrecarga.
Así las cosas podríamos analizar con más detalle cada uno de estos aspectos, pero hay uno que he comentado esta semana con varias personas y resulta … controvertido.

Mucha gente que empieza a correr no sabe cómo hacerlo. Qué entrenamiento realizar. Entonces hace lo que hacemos todos en la era moderna: preguntárselo a Gooooogle… “plan de entrenamiento para correr 10 km”.
Unos segundos después tienes … 1.060.000 resultados. ¿Cuál elegir? … “¿Y yo qué sé … si no sé nada de esto?”.
Entonces miras unos cuantos y acabas imprimiendo uno que parece que te gusta y que se adapta a tus intenciones.
Y ahora viene la parte que yo comentaba con mis amigos: … muy bien. Tienes un plan que ha escrito alguien que no te conoce de nada.
Y tu eres como Javier, un trabajador de la construcción de 44 años, que se levantas a las seis de la mañana y vuelve a las siete de la tarde, se enfunda su chandal y se poner a hacer “30’ calentamiento+5*1500 m rec 1’ entre series + 15’ rodaje suave +sesión abd+ estiramientos.” … cuando consigue descifrar lo que significa. Y a las dos semanas no le queda más remedio que parar porque está reventado y no puedes más … o porque le duele a rabiar … supongamos el tendón de Aquiles (puede ser el tibial, la rodilla, los isquios, los abductores…).
También puede ocurrir que seas Juanjo, que está en el paro, tiene 26 años y lleva toda su vida montando en bici y está como un toro.
Entre uno y otro hay enormes diferencias: en el tiempo de dedicación, en la capacidad de recuperación, en el descanso diario, …
¿Vale el mismo plan para los dos? Pues no. No vale.
Entonces … qué solución hay.
El entrenador.
La figura de una persona que te observe, que te conozca con el paso del tiempo, que te entienda y que te diseñe un entrenamiento que, poco a poco, te permita ir creciendo como corredor, como atleta. Que sepa cuando es momento de apretarte y cuando de parar un poco, de darte un respiro y que te pueda resolver todas las dudas que cualquier persona tiene en los inicios de una actividad.
Que sepa que cuando duele algo, hay que levantar un poco el pie, observar la reacción del cuerpo y ver si persiste el dolor o remite. Que sepa que los estados de ánimo condicionan los resultados, tanto en los entrenamientos como en las competiciones. Que sepa motivar, animar.

Un entrenador que sepa lo que hace, por conocimientos adquiridos o por experiencia y que sepa transmitirlo.

lunes, 15 de septiembre de 2014

10 KM POR PAREJAS DE EL FRESNO 2014



Se pueden hacer unas cuantas cosas para conseguir que un 10.000 sea algo diferente. Un poco de imaginación a la búsqueda de algo original fue suficiente para hacer de la carrera de El Fresno una alternativa divertida y atractiva, tanto para los corredores como para el público.

Al final del verano son tantas las carreras que se han venido celebrando que conseguir una inscripción elevada era poco menos que un imposible, pero a poco que funcione el “boca a boca” y si la carrera se mantiene en el calendario (como todos los que corrimos deseamos) será con seguridad una de las más populares de las que se celebran en las cercanías de Ávila.

La organización resultó excelente en un circuito completamente llano de 2,5 km por el casco urbano de El Fresno, ese pequeño pueblo por el que tantas veces hemos pasado, corriendo o en bici, esta vez lleno de gente animando el paso de los corredores.

La carrera se disputaba en tres categorías, masculina, femenina y mixta. La pareja formada por José Antonio y Borja, del Puente Romanillos, se alzó con el triunfo. Por su parte en categoría femenina Pilar y Olga no tuvieron problemas en conseguir la victoria.

Mucho más disputada estuvo la categoría mixta, resultando al final campeones la pareja Roberto Rubén y Cristina.

Mercedes y yo terminamos 18º (5º mixto) con las piernas bastante machacadas aún de nuestras últimas aventuras y Ángel, formando pareja con Sergio, en 9º posición.

Al término de la carrera un avituallamiento muy variado (y para los golosos, entre los que me encuentro, … irresistible) y unas cervecitas por gentileza de los bares locales en un ambiente atlético muy majete.


Enhorabuena a la organización y a esperar la próxima edición.

jueves, 11 de septiembre de 2014

COMIENZA EL RETO SOLIDARIO TRANSAVILA




Mañana viernes 12 de septiembre Juan Miguel y Pablo saldrán de Ávila para recorrer 356 km cada uno de ellos alrededor de toda la provincia.
Un reto solidario encaminado tanto a concienciar a la sociedad sobre la importancia de la donación de médula espinal como a recaudar fondos a favor de la delegación abulense de la Asociación Española Contra el Cáncer.
356 km de carrera, bici de montaña y de carretera, en un recorrido circular que partiendo desde la capital les llevará por El Barraco, Valle Iruelas, Casillas, Navaluenga, Navatalgordo, Navarredonda de Gredos, Barco de Ávila, Piedrahita, Cabezas del Villar, Muñico, Arévalo, Gotarrendura y regreso a Ávila.
356 km seguidos, en dos días sin apenas paradas para comer algo, cambiar de “montura” y calzado y estirar un poco para continuar.
Hay que tener unos principios muy sólidos y mucha conciencia social para lanzarse a una aventura así. Y además hay estar en una forma física más que buena.

Para aquellos que queráis colaborar están a la venta camisetas TRANSAVILA en SOLORUNNERS, C/ Estrada 10 y el ALIMENTACIÓN MARINA  C/ Logroño 8.

martes, 2 de septiembre de 2014

ULTRA... (COMO FORREST GUMP PERO A LO BESTIA)



Cada vez me encuentro con más gente dedicada al más allá del atletismo. Me refiero exactamente al significado del prefijo “ultra”… más allá.
Corredores que desplazan la coma de su personal sistema métrico decimal a capricho y no temen enfrentarse a pruebas de larga …, mejor decir … larguísima distancia.
Como Forrest Gump … pero a lo bestia.
Corredores que entrenan decenas de kilómetros al día y solo son felices si el entrenamiento se hace en las condiciones más difíciles de entre lo disponible: un camino es una autopista asfaltada, un sendero es considerado un lujo casi  despreciable, el campo a través con la mayor cantidad de piedras (mejor si están sueltas) va resultando atractivo. Y … en cuesta. En cuesta … cuesta. Cuestas que no falten. No vale una rampa tendida. No. Vale tener que apoyar las manos en las rodillas antes de hacer estallar los cuadriceps. Vale roca. Vale piorno.
Y las bajadas…. A tope. A puro brincocabra.
Y cuando es en bici, otro tanto de lo mismo. Salir por el Valle Amblés o el Campo Azálvaro es Verano Azul. Hay que meter caña en las rampas de la Paramera o, si es algo más lejos, probar algún cortafuegos del Tiemblo o del Tietar. Mejor ahora que cuando están repasados. Ahora tienen regatos y torrenteras y se disfruta más.
Y cuando se tercia, se cambia la bici de montaña por la de carretera y se meten unos puertos para no dejar pasar el día sin una emocionante bajada después de la inevitable subida.
Así es.
Y yo lo veo con cierto desconsuelo, mezclado con algo de envidia y también de alivio. ¿Me engancho? ¿Me descuelgo? Soy una nenaza. ¿Soy una nenaza? En mi momento (esa edad en la que estás para hacer las cosas que quieres porque no tienes demasiadas ocupaciones y porque el cuerpo está entero) me dediqué al maratón como máximo exponente del esfuerzo supremo. Desde los 15 años. Demasiado tierno aún. Es verdad que existía alguna carrera de 100 km, pero no corrían más allá de sesenta u ochenta corredores. Luego comenzaron las carreras y maratones de montaña y, a partir de ahí, la fiebre “ultra”. Acompañada de otras carreras en las que decididamente se busca castigar al corredor: reptar en el barro, superar alambradas, muros que se salvan con cuerdas…
Ahora, aunque tenga tentaciones de bajar corriendo desde el Zapatero a Sotalbo, después de haber subido, me aterroriza pensar en mis rodillas o en mis pies tras semejante descenso.
Y todos los que se dedican a esto me dicen siempre lo mismo: Nada es igual a lo que tú has hecho; correr por asfalto o por caminos. Olvídate del tiempo. Quítate el reloj y sal a correr por el monte al ritmo que quieras. Camina si lo necesitas. Sube despacio. Baja relajado. Disfruta del monte.

Y mis rodillas y mis pies me miran con esa carita de susto, me hacen pucheritos y me dicen en un casi inaudible susurro… no… por favor … no … otra vez no.